«La semana pasada sufrimos mucho para ganar dos partido fuera de casa y, ante el Mallorca, tenemos que hacer valer esos seis puntos que conseguimos», declaró en rueda de prensa Valverde, quien insistió en que el equipo afronta esa recta final del año como «uno de los tramos más importantes de la temporada».
Clasificado para los octavos de final de la Liga de Campeones como primero de grupo, a falta de una jornada del final, los azulgranas volcarán todos sus esfuerzos en ganar al conjunto balear, conscientes de que el próximo martes, ante el Inter de Milán, no se juegan nada. El Mallorca, además, parece un rival idóneo para mantener el liderato, pues la escuadra bermellona encadena seis derrotas como visitante.
«Es cierto que fuera de casa le está costando, pero en casa es un equipo solvente. Juegan sin complejos, intentan presionar y vendrán con la intención de plantarnos cara y de sacar algo positivo», comentó Valverde al respecto.
El preparador extremeño no podrá contar con el delantero Ousmane Dembélé, que estará los dos próximos meses de baja, ni tampoco con sus dos laterales titulares, Jordi Alba y Nelson Semedo, en pleno proceso de recuperación de sus respectivas lesiones.
«Ninguno de los dos laterales ha empezado a hacer nada con el grupo, aún. Y tampoco vamos a arriesgar en este sentido», desveló Valverde, que sí podrá contar con Gerard Piqué quien, renqueante, tuvo que ser sustituido en el último compromiso liguero con el Atleti: «Lo de Piqué solo era un golpe y ha entrenado absolutamente bien durante toda la semana».
Preguntado por los insultos hacia Antoine Griezmann por parte un sector de la afición del Atlético en el Wanda Metropolitano y la posible sanción al club colchonero, el entrenador del conjunto azulgrana prefirió no valorar el incidente en profundidad. «No soy juez, ni tengo conocimientos necesarios para saber qué tipo de sanción corresponde. Pero parece que los insultos en el fútbol están permitidos y no entiendo por qué», dijo.
En Madrid, su equipo ganó una vez más gracias a la calidad de Leo Messi y la actuación de Marc André ter Stegen bajo palos. Valverde admitió que el meta alemán es una pieza fundamental en el equipo, «por lo que para, por lo que nos genera en la salida de balón y por la tranquilidad que nos transmite».
Sobre Messi ya se le han acabado los calificativos: «A veces, el día a día no te deja disfrutarlo del todo, pero soy consciente la enorme fortuna que tengo. Dentro de un tiempo podré decir que yo he entrenado a Leo». Antes del partido ante el Mallorca, el astro argentino ofrecerá su sexto Balón de Oro a la afición. «Viendo la foto de los seis Balones de Oro, todos juntos, impresiona, y más porque todos pertenecen al mismo, lo que da una idea de quién es el que está detrás», apuntó Valverde, quien quitó hierro a la confesión del '10' azulgrana de que, a sus 32 años, ve la retirada más cerca. «Creo que se le está dando demasiadas vueltas a algo que me parece natural y normal. Le ocurre a cualquier jugador que pasa de los 30, que siempre ve el final más cerca. Leo tiene 32, pero no se va a retirar mañana ni dentro de tres días», concluyó