Se acabó la espera. El Palma Futsal abre el telón a una nueva temporada cargada de retos, ilusiones y sueños por cumplir. Otro año en la élite del fútbol sala mundial, la décima temporada en la mejor liga del mundo, la novena de forma consecutiva. En el recuerdo queda el año del debut en 2.009 en una campaña que acabó de la peor manera posible o el regreso a la élite un año después que culminó con la primera participación en la Copa de España y el playoff. Desde entonces, el club se ha consolidado en Primera División y ha crecido hasta convertirse en uno de los clubes de referencia a nivel deportivo y social. El club sigue mejorando a ritmo de récord tanto de abonados como de asistencia a los partidos y con una plantilla que ha aumentado el nivel de exigencia deportivo firmando temporadas extraordinarias en la pista. El Palma se ha instalado en la élite de la élite y ahora busca mantenerse como uno de los equipos que cada año sorprende por sus prestaciones. La carta de presentación para este nuevo curso es un equipo reforzado con tres fichajes de nivel y experiencia y una pretemporada con resultados sobresalientes y grandes sensaciones aunque a partir de ahora el pasado no cuenta. De nada sirven los resultados de la fase de preparación ni tampoco la gran imagen del playoff de la pasada campaña. El deporte no tiene memoria y solo cuenta el presente y el futuro a corto plazo.
El Palma Futsal inicia otra campaña repleta de ilusión a partir de este viernes (19:00 horas) frente al Levante UD FS, un rival que ha cambiado de entrenador, con tres refuerzos y que se ha convertido en un rival directo del conjunto balear en la lucha por estar bien clasificado para todas las fases finales. El Palau Municipal d'Esports de Son Moix será testigo del estreno oficial de los de Antonio Vadillo, que quieren mantener su pista como un gran fortín y aspiran a seguir con la comunión con su afición que tantas noches de gloria dio en el pasado.