"Nuestro plan estratégico es quitar las pistas de atletismo pero no nos volvamos locos".
La reunión es la misma que en años anteriores, de planificación para el próximo año y un balance objetivo tanto a nivel deportivo como económico del anterior. Me hace gracia que se diga que la gestión es un desastre porque ha ido muy bien. Es el año en que hemos superado en un 100% los ingresos en abonados y venta de entradas.
Desconocemos el tope salarial que vamos a tener. El primer paso es cerrar el presupuesto con la propiedad y después enviarlo a la Liga con los ingresos detallados.
Nuestro deber era planificar en Segunda y en Primera, y en abril vimos que el ascenso era posible. Si había ascenso había que analizar los ascensos de otros equipos y estudiamos los clubes que habían ascendido en los últimos años. A partir de allí hicimos una propuesta a la propiedad y les pareció correcta.
Hay 17 millones de deuda, y hay que abonar ahora gran parte de lo que se ha aplazado durante los 6 años en Segunda".