Pagès, el técnico que hace dos temporadas consiguió el histórico ascenso a LEB Plata y el anterior curso lideró la permanencia exprimiendo al máximo las capacidades de cada uno de los integrantes de la plantilla, ha dado el visto bueno a la propuesta que le ha hecho llegar el club para mantenerse al frente del equipo en la segunda temporada en la tercera categoría nacional de baloncesto.
Junto a Pagès, también han dado el ‘sí quiero’, el que ha sido su cuerpo técnico a lo largo de esta temporada. De este modo, Javier García Panizo seguirá como técnico ayudante en la preparación del día a día y de los partidos, Luis Pons Livermore se encargará de la preparación física, Josep Jover será el fisioterapeuta y el doctor Antonio Gómez de Tejada seguirá siendo el médico del equipo. A estas renovaciones falta sumar la del delegado, Manu Benito, quién medita su respuesta y tomará una decisión en los próximos días.
“Estoy alegre, muy contento, desde el primer momento me siento identificado con este proyecto, hemos hecho 2 años en los que hemos cubierto los objetivos tanto deportivos como sociales”, explica Oriol Pagès. El técnico catalán, afincado en la isla desde 2005, con experiencia como ayudante de Xavi Pascual en ACB y en el extranjero como asistente de Josep Maria Berrocal –con quién logró el ascenso deportivo a ACB con el extinto Menorca Bàsquet-, matiza: “El club está creciendo y nosotros lo hacemos con él. Me hace mucha ilusión, tengo mucha ambición y ganas de empezar cuanto antes a trabajar”.
Tras un primer año en LEB Plata, qué es lo que ha aprendido el técnico. “Ahora conozco más la categoría, cómo funciona el arbitraje, los jugadores, el sistema de competición. Hemos aprendido a ver qué puntos tenemos que mejorar del equipo para seguir creciendo”.
El objetivo deportivo pasa por “seguir creciendo. El club va dando pasitos pero con paso firme, mirando hacia adelante. Tenemos que hacerlo mejor que el año pasado”. Con todo, Pagès admite que “es pronto para fijarse retos concretos, el equipo está en construcción, al igual que el de los rivales” pero por encima de todo estará “sacar el máximo rendimiento de los jugadores que tengamos”.
A nivel social, Pagès sabe que su plantilla debe “hacer disfrutar a la afición, que estén orgullosos de nosotros y que tengan ganas de seguir apoyándonos”. Cree el catalán que “tenemos que mantener la ilusión que se respira por el baloncesto y, si podemos, ser capaces de incrementarlo. El club seguirá trabajando en ese sentido y es lo que tenemos que hacer. Queremos ser un equipo luchador que no dé ningún balón por perdido, ningún partido por perdido”.