Llegábamos a la conclusión simple y llana de que las personas grises y poco inteligentes, aunque muy leídas pueden ser de lo mas aburridas en tu vida. La importancia de rodearte de personas inteligentes es fundamental que a la par poco habitual, me ha salido un pareado sin pretenderlo.
Lo que si me seducen son las personas inteligentes capaces de cambiar de registros y de texturas en la conversación sin que te des cuenta. De lo que si te enteras cuando ha pasado un rato, es de que te han cautivado con el placer de hablar y conversar. Y no me refiero a esos vendedores de humo o “fantasmas” como se les llama, que por su palabrería te seducirán pero si rascas un poquito no hay nada más. Me refiero a este tipo de personas atractivas, seguras de sí mismas y con mucha alegría y ganas de vida.
Detesto a esos personajes grises que siempre están a disgusto con el mundo y que te arrastran a su abismo cuando tienes ese don de la empatía y la felicidad. Maldita sea a veces la empatía, porque será muy buena cuando el personaje hombre o mujer sea bueno, agradecido, inteligente, pero como sea de los que nunca esta bien con el mundo, ni consigo mismo, ¡Houston tenemos un problema! Son personas tóxicas que si te descuidas te arrastran a su abismo.
En cambio me encantan las personas enamoradas de la vida, que aún con las piedras en el camino y montañas a cruzar, se toman las cosas con optimismo, ¡alegría y ganas!. Estas personas son las que me enamoran, me embrujan y encima si tienen una conversación inteligente son de agradecer en el camino de tu vida.
La vida es demasiado corta para no disfrutarla al máximo y rodearte de tus seres queridos y personas que te aportan ¡eso!, alegría, desarrollo y paz interior. El sufrimiento, el desinterés y las mentiras crean esa desconfianza que hace que uno se pregunte hasta donde puede aguantar el ser humano. ¿Porque crease un problema en aguantarlo?
Me llaman mucho la atención esas personas que siempre están ahí, para lo bueno y para lo malo, las que nunca te fallan, las que aunque pasen los años no cambian y son leales y auténticas.
Si encontraste una o si tienes la suerte de convivir con una de ellas ¡Enhorabuena! Sedúceme con tu inteligencia y no con tus penas…