En un partido trepidante en la pista Arantxa Sánchez Vicario, la segunda en importancia en las instalaciones de la Caja Mágica, el jugador de Santanyí no ha podido doblegar al número 13 de la clasificación mundial, que se ha mostrado más fiable y más entero en el tercer y definitivo set.
El encuentro fue una verdadera montaña rusa de tenis y emociones, con los dos jugadores alternando golpes ganadores y errores no forzados, y que se vio interrumpido a mediados del primer set cuando uno de los altavoces comenzó a retumbar insistentemente.
Arrancó mejor Jaume Munar (3-0), pero pronto reaccionó Karen Khachanov, que se colocó por delante y gracias a la potencia de su derecha fue capaz de cerrar el primero por 6-4.
Lejos de ser un golpe duro para el mallorquín reaccionó a tiempo y llegó a servir para ganar sin excesivos aprietos el segundo parcial. No lo logró a tiempo y el desenlace citó a ambos tenistas en un desempate, a todo o nada para el local.
Vitoreado y jaleado por el público español, Jaume Munar fue capaz de llevarse ese desempate y forzar el tercer set, decisivo.
Y ahí es donde el físico y la resistencia le jugaron una mala pasada. El comienzo fue devastador para él, ya que en apenas veinte minutos se vio 5-1 abajo y sin apenas opciones de darle la vuelta. No se rindió pronto y llevó el partido hasta el 5-3, momento en el que, apoyado en su servicio, Khachanov rubricó su victoria después de 3 horas de intensa batalla.
La derrota corta la trayectoria de Jaume Munar este año, en el que había logrado cinco veces los cuartos de final. Llegó a Madrid tras ceder en octavos de final en el Conde de Godó contra el austríaco Dominic Thiem, y con el recuerdo de haber derrotado al alemán Alexander Zverev, entonces tres del mundo, en el torneo de Marrakech.
Ahora, Khachanov se las verá en la siguiente ronda del torneo madrileño con el vencedor del duelo entre el madrileño Fernando Verdasco y el moldavo Radu Albot.