"Espero", contestó el mallorquín escuetamente a la pregunta de si podrá jugar seguro mañana.
"Es difícil para mí contestar, porque cualquier cosa que diga se puede tomar de forma negativa. Nadie puede garantizar nada de lo que vaya a ocurrir el día siguiente porque, en este mundo, cualquier cosa es posible", indicó.
"Pero por supuesto que mi objetivo y mi idea es estar listo para mañana. No puedo garantizar cómo me voy a despertar mañana", afirmó.
Pese a jugar cojo todo el segundo set, Nadal se clasificó para las semifinales de Indian Wells al vencer por 7-6 (2) y 7-6(2) en dos horas y 18 minutos a Khachanov.
Su rival en esa ronda será el suizo Roger Federer, a quien no se enfrenta desde hace año y medio. Será el duelo número 39 entre ambas estrellas.
El mallorquín mostró una gran versión de sí mismo durante el primer set y fue todo pundonor en la segunda manga, donde hizo un esfuerzo heroico para superar a su rival.
"Estoy acostumbrado a jugar con algunos problemas, así que intenté mantenerme concentrado y aguantar la situación. Es una de esas victorias de las que me siento realmente orgulloso", declaró.