El presidente Luis Rubiales, junto a su equipo jurídico de la Real Federación Española de Fútbol, recibió la visita de Rafael González, coordinador del fútbol base del Colegio Ágora Portals de Calvià, así como los miembros del club deportivo de dicha escuela, Koldo Alonso, Isidoro de Miguel y Daniel Fiol como asesor jurídico. La reunión fue tramitada por el vicepresidente de la RFEF y presidente de la FFIB, Miquel Bestard.
Los miembros de Ágora Portals expusieron al presidente Rubiales que la normativa actual de tramitación de fichas federativas de niños y niñas menores de edad en clubs que no son de ámbito del fútbol profesional, como puedan ser colegios, es excesivamente estricta. Existe muy poca diferencia para la tramitación de fichas entre clubs profesionales y clubs de colegios. La reivindicación es facilitar la tramitación a los clubs no profesionales.
La normativa actual de la FIFA lucha para evitar contrataciones masivas de jugadores de otros continentes o de fuera de la Unión Europea con el fin siempre de proteger al menor. De hecho, la FIFA ha sancionado a varios clubs europeos de élite por este tipo de prácticas incontroladas en los últimos años.
Una ley hecha para favorecer al menor, perjudica puntualmente a menores que están fuera del fútbol profesional, entienden desde el colegio de Calvià. Ágora Portals, como escuela que fomenta los valores del deporte y en especial del fútbol, dispone de categorías de fútbol base donde cada año tiene que rechazar la voluntad de muchos padres y madres extranjeros de inscribir a sus hijos para practicar el juego que les gusta. Se impide así que se fomente su integración y sociabilidad y puedan hacer ejercicio físico practicando su pasión. Son casos de padres y/o madres que han recibido una oferta de trabajo muy importante para trabajar en España y cambian su residencia. De hecho, la RFEF ya trabaja en poder acelerar las fichas federativos en menores refugiados o que llegan a España en situación irregular y dramática.
Como expusieron los representantes de la institución educativa, son casos sin ningún tipo de interés especulativo por el derecho de estos menores en el futuro, ya que no contemplan como colegio que puedan llegar a la élite, sino que simplemente hagan deporte con sus amigos y compañeros, muchas veces como actividades extraescolares.
La respuesta de la RFEF, a través de su presidente Luis Rubiales, fue de máxima atención, exponiendo que evidentemente traspasa sus competencias al tratarse de normativa FIFA, pero que estudiaría el caso con el fin de poder trasladar esta inquietud al máximo organismo del fútbol mundial.
