El Palma Futsal abandona Valencia con el orgullo de haber jugado la final del torneo infantil más prestigioso y con una imagen brillante como cantera pero con la pena de que el éxito se quedó al alcance de la mano. El equipo infantil perdió la Minicopa de España por tan solo un gol (7-8) frente al campeón, que revalidó el título en los últimos segundos de un partido en el que tuvo que sudar más que de costumbre para lograr el triunfo. El Palma Futsal ofreció una imagen brillante para poner la guinda a un torneo extraordinario y en el que el subcampeonato ya supone un gran logro pese a no haber conquistado el título. Nil Tent fue elegido el mejor jugador del torneo tras otro partido memorable en la gran final.
Los jóvenes valores han demostrado estos días el potencial de la cantera balear con tres puestas en escena sobresalientes. La gran final apuntaba a una misión imposible frente al campeón y el gran dominador de todas las ediciones celebradas hasta la fecha, la cantera imbatible y que estuvo contra las cuerdas gran parte de todo el partido ante un Palma Futsal que brilló con luz propia en el torneo infantil. Pese a comenzar el partido perdiendo, el Palma Futsal se repuso rápido con tres goles de Joan Ginard para darle la vuelta a un marcador que fue oscilando durante todo el partido. Nil Tent, elegido como la estrella del torneo de este año y uno de los jugadores más destacados de la cantera balear, marcó el cuarto con el que daba ventaja a los isleños en el descanso. La misión parecía incluso factible pese a tener enfrente al gran campeón. El Barcelona marcó de inicio en la segunda parte igualando el encuentro otra vez pero el Palma respondió de inmediato con otro tanto de Nil. Fue el guión de casi todo el partido con el Palma por delante en el marcador y el Barcelona empatando el encuentro en cada ocasión hasta el desenlace final. Nil marcó el sexto para abrir las puertas de la esperanza pero el Barcelona igualó a falta de seis minutos para el final. El partido fue memorable entre dos equipos que ofrecieron un espectáculo poco habitual en estas edades. El punto de inflexión fue a falta de cinco minutos cuando el conjunto catalán logró adelantarse por primera vez en el marcador desde el comienzo del partido. Con la renta a favor no desaprovechó la oportunidad para llevarse el título. El Palma Futsal peleó hasta el final y se le escapó el título a falta de un minuto con el octavo gol del Barcelona. Pese a ello, el pundonor de los niños dirigidos por Tomás Bernabé y Jesús Illán fue ejemplar y Alebert marcó el séptimo gol para rubricar una actuación extraordinaria de los mallorquines.
El Palma Futsal ha jugado la primera gran final nacional de un torneo oficial de cantera con una imagen destacada del potencial que tiene el conjunto isleño y la cantera balear, que año a año sigue creciendo y cuyo futuro invita a soñar en grande.
