Todo se inició el 5 de enero del 2016 cuando el grupo inversor estadounidense, encabezado por el multimillonario banquero de Arizona, realizaba una ampliación de capital y adquiría el paquete mayoritario de acciones del Real Mallorca. Recordar que Utz Claassen anterior máximo accionista del club se había dado cuenta que su etapa en la entidad mallorquinista ya no era posible ya que no era capaz de mantener el portaaviones. El Real Mallorca necesitaba un mirlo blanco y lo ha encontrado en la figura de Sarver y su grupo hasta la actualidad
En el apartado económico no se le puede escatimar ni un solo elogio. La propiedad ha cumplido con todos los compromisos y ya acumula una inversión cercana a los 40 millones de euros. El club se muestra solvente y no existe el peligro de repetir los errores que llevaron a una deuda cercana a los 80 millones de euros. Por otra parte el Estadio de Son Moix y la Ciudad Deportiva de Antonio Asensio han sido reformados. Son Bibiloni había pasado de ser un ejemplo de Ciudad Deportiva a una instalación descuidada y con numerosos problemas logísticos, ahora vuelve a ser una referencia.
En el apartado deportivo los éxitos han brillado por su ausencia y hasta que no se bajó al infierno de la Segunda B no hubo un plan establecido y coherente.
Maheta Molango llegó en enero del 2016 y le dio la confianza a Fernando Vázquez por encima de Pepe Gálvez, una decisión que sería un desastre en meses anteriores. El técnico gallego no cumplió las expectativas y el primer equipo se salvó de milagro en Valladolid del descenso. Un año después, y tras una horrible planificación deportiva por parte de Maheta Molango y de Javier Recio con tres entrenadores, (Váquez, Olaizola y Sergi Barjuan) y multitud de fichajes erróneos, el Real Mallorca descendía a Segunda B. 36 años después el club mallorquín dejaba la Liga de Fútbol Profesional.
Todo pareció cambiar aquel verano. Se contrató a Vicente Moreno, pieza clave en el actual proyecto, y una plantilla de futbolistas que logró el ascenso de categoría. Solo quedaron tres futbolistas del año anterior y en Miranda, después de una temporada positiva en todos los aspectos, el Mallorca regresaba a la élite del futbol español y con expectativas de crecimiento. Veremos lo que ocurrirá esta temporada en Segunda.
Finalmente, hay que señalar que durante estos más de dos años y medio, el club ha contado con tres presidentes. El primero fue Utz Claassen, el segundo Monti Galmés y ahora es Andy Kohlberg quien ostenta la presidencia del club.
Queda mucho por ver y por hacer, pero el club no debería desperdiciar la oportunidad que te otorga disponer de una propiedad potente a nivel económico, ahora es el tiempo de la gestión.