Es noche cerrada en Londres, un ocho de noviembre, apenas cuatro días antes de que arranque, en el colosal pabellón O2 Arena, el ATP Finals, el torneo que pone punto y final a la temporada tenística y el único que le falta a Rafael Nadal (Manacor, 1986) en su ya de por sí amplio palmarés.
Llega al último torneo del calendario como destacado número uno del mundo tras un año excelso, en el que ha recuperado su mejor tenis y ha levantado seis títulos, entre ellos su décimo Roland Garros y su tercer Abierto de Estados Unidos.