La emergencia habitacional ha provocado que parte de la población considere al alquiler vacacional como el verdadero culpable de esta crisis. Como todo, el alquiler turístico tiene sus defensores y detractores.
Así, hay quien afirma estar "totalmente en contra", mientras que otros opinan que "alquilarlo para particulares estoy de acuerdo, pero turísticamente, para eso ya están los hoteles". Por otro lado, hay quien señala que "si tienes un piso y quieres alquilarlo a personas que vienen a pasar unos días, me parece bien".
También hay quien denuncia los problemas de convivencia que pueden provocar. "Tenemos un piso vacacional al lado y vienen a pasarlo bien, no conciben las normas de convivencia, no respetan el silencio y el descanso", advierte una participante.
La falta de Vivienda de Protección Oficial (VPO), la ley de oferta y demanda y los elevados precios han provocado que muchos no puedan volar del nido. Instituciones como el Ayuntamiento de Palma han actuado prohibiendo el alquiler vacacional en pisos plurifamiliares para intentar solucionar la falta de inmuebles.
Pero, ¿es el alquiler turístico el causante de estos elevados precios? "Si viene uno y paga más, el que está aquí tiene que pagar mucho más para alquilarlo, todo influye", asegura uno de los encuestados. Añade otro: "yo no lo veo así, si suben los precios es porque no hay oferta suficiente, no creo que el alquiler vacacional tenga que ver".
"Lo que habría que hacer es poner un precio económico que la gente pueda pagar", ha indicado un participante, añadiendo que "a veces vale más ganar un poco menos de dinero y alquilar la vivienda a una persona o familia de larga duración para que tengan una estabilidad y un trabajo en la isla".
Cabe recordar que el Ayuntamiento de Palma prohibió el alquiler turístico en pisos plurifamiliares en 2018 con la intención de abaratar los precios del alquiler en la ciudad. y facilitar el acceso a la vivienda, pero una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB) la anuló al considerar que la prohibición es "desproporcionada e innecesaria".
Tras la sentencia, el alcalde de Palma, José Hila, ya dejó claro que este tipo de alquiler seguirá prohibido en la ciudad.