En declaraciones a los medios durante un acto en Palma, la consellera ha recordado que se trata de una cuestión que depende de legislación estatal y ha insistido en que "la salud pública no se puede imponer por la fuerza".
Aunque ha recordado igualmente que existen casos en los que se podría obligar a la vacunación, ha admitido que la imposición de la vacuna a determinados trabajadores podría generar situaciones de discriminación.
En todo caso, Gómez ha recalcado que vacunarse es "lo aconsejable" y ha animado a los trabajadores sociosanitarios que rechazan la vacunación a que "piensen que se trata no solo de un bien personal sino también de protección a personas vulnerables".
En relación a las declaraciones de la consellera de Afers Sociales i Esports, Fina Santiago, que defendió, a título personal, que el debate de la obligatoriedad no se estaría dando si en lugar de personas mayores estuvieran muriendo jóvenes, Gómez ha subrayado que "todas las vidas humanas son igual de importantes" y ha animado a hacer un esfuerzo de comunicación de la importancia de la vacunación para llegar al máximo de población posible.