El pasado mes de junio, Satse advirtió que las distintas administraciones sanitarias no podían repetir el "mismo error" de todos los años de no reforzar las plantillas de profesionales ni proceder al cierre de camas, unidades y servicios en los meses de verano, teniendo en cuenta que la pandemia del Covid-19 seguía "muy presente" en España
"Lamentablemente, ahora nos encontramos en una situación con un creciente aumento del número de casos de nuevos contagios de Covid-19 que deben ser atendidos en unos centros de salud y hospitales cuyos profesionales están sobrecargados, exhaustos, agotados y con unas condiciones laborales tremendamente tensionadas", han apuntado desde la organización sindical.
Un personal sanitario que, además de atender y cuidar a personas con Covid-19, deben seguir dando respuesta a las necesidades asistenciales y de cuidados del resto de población que padece cualquier otra enfermedad o problema de salud.
A juicio del sindicato de Enfermería, la actual situación es fruto del "interés prioritario" de los distintos servicios de salud de aprovechar el verano para "ahorrarse dinero", algo "especialmente grave" cuando era previsible que la relajación de las medidas preventivas en el conjunto de España conllevase un aumento de los casos de nuevos contagios.
"Tras año y medio de pandemia, volvemos a constatar, lamentablemente, que nuestros responsables públicos han aprendido poco, por no decir nada, y siguen sin destinar los recursos y medios necesarios para que nuestro sistema sanitario esté preparado para nuevas olas del Covid-19 y que no sean los pacientes y profesionales sanitarios los que sufran las tremendas consecuencias de su deficiente gestión y planificación", ha aseverado el sindicato.
En este sentido, Satse ha confiado en que lo que está pasando este verano les haga reconsiderar la posible decisión de "no renovar los contratos Covid" que se hicieron al inicio de la pandemia y que finalizan en los próximos meses. "Si con ellos, las plantillas siguen siendo aun absolutamente insuficientes, la situación iría a peor inexorablemente por una clara muestra de ineptitud administrativa", ha añadido.
Dicho esto, la organización sindical ha recordado que, en lugar de reforzarse recursos y medios, este verano se han cerrado más de 9.600 camas, 2.700 más que el pasado año, y se han paralizado miles de consultas, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas en los hospitales de nuestro país, además de proceder al cierre de centros de salud, fundamentalmente en horario de tardes.
"Asimismo, con la llegada del verano se han realizado contrataciones por vacaciones aprobando suplencias en los distintos servicios de salud para únicamente el 30-40 por ciento de la plantilla, con lo que el trabajo y responsabilidad de 60 profesionales de cada cien deben hacerlo los que prestan sus servicios en el periodo estival", ha zanjado Satse.