Mediante estas inspecciones domiciliarias, se comprobará que los ciudadanos adheridos al programa separan correctamente la basura y por lo tanto, pueden beneficiarse de hasta un 39% de bonificación en su tasa de residuos.
De este modo, los ciudadanos deberán de permitir que alguno de los cuatro educadores ambientales que irán debidamente identificados y que se encargarán de esta tarea, entren en sus domicilios para comprobar que separan correctamente los residuos, o mostrarles los diferentes recipientes donde llevan a cabo la separación de los residuos.
Según ha explicado Bernardí Vives "nuestro objetivo es incentivar que se separen los residuos en origen para facilitar el reciclaje y esperamos que muy pronto muchos más residentes se inscriban en la campaña, demostrando que somos un municipio que cuida del medio ambiente".
Aquellos ciudadanos que reciclen correctamente tendrán un descuento en su tasa de residuos, que puede variar en función de la tipología de vivienda o local. Así, los usuarios adheridos al programa tendrán descuentos de hasta el 39% respecto a los no adheridos y una rebaja de hasta el 15% (31 euros) respecto al actual coste de la tasa.
En el caso de los locales comerciales, la rebaja representa cerca de un 30% y una bajada del 10% respecto a la actual tasa. En el caso de las viviendas en suelo rústico, con motivo de la redistribución de los contenedores en suelo rústico y creación de áreas de aportación vigiladas, se reducirá al 50% el coste de la recogida, en caso de estar adheridos al programa. Así, el coste total de la tasa para estos usuarios percibirá una rebaja del 80% respecto a la actual tasa (-105 euros).
La adhesión a este programa es voluntaria, pero es destacable el hecho de que los usuarios que no se inscriban y, por lo tanto, no se comprometan a reciclar, verán incrementadas sus tarifas de residuos hasta en un 17% respecto a la tasa actual.
El alcalde de Llucmajor, por su parte, ha puesto de manifiesto que "desde el Ajuntament apostamos por conseguir un municipio cada vez más sostenible, y por ello ponemos a disposición de nuestros ciudadanos las herramientas necesarias para lograrlo". Jareño ha querido aclarar que "no pondremos sanciones a las personas que no reciclen correctamente, ya que la tarea de los educadores es inspeccionar y, en el caso de que sea necesario, informar sobre como se ha de llevar a cabo una correcta separación de residuos".
Las inspecciones, que empiezan esta semana, se iniciarán en aquellas zonas del municipio con mayor densidad de población durante el verano y en el caso de que la persona no se encuentre en casa en el momento de la inspección se realizará una segunda visita.
Los ciudadanos que no se hayan adherido al programa y quieran participar podrán hacerlo a través de las Oficinas de Atención al Ciudadano (OAC) del Ajuntament, pero no recibirán las bonificaciones hasta el recibo del año que viene.