De hecho, en la segunda zona de la incineradora ya han encontrado restos óseos que podrían corresponder a la joven desaparecida, por el momento, han sido remitidos al Instituto de Medicina Legal de Palma para ser analizados.
La última imagen de Agostina con vida fue registrada por una cámara de seguridad a las 23.57 horas en la confluencia entre la plaza des Pont y la calle Andrea Doria. Los agentes sospechan que desde allí pretendía tomar el autobús hasta Palmanova, donde residía.
Tras recibir la denuncia de la desaparición de la joven, el Grupo de Homicidio ha puesto en marcha una gran investigación. Se ha tomado declaración a numerosos testigos y se han revisado las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona por donde pasó Agostina aquella noche, que recordar había salido de fiesta con unos amigos por la zona de Santa Catalina.
Gracias a estos datos se han reconstruido sus últimos pasos. Concretamente, es a las las 23:57 horas del miércoles dos de octubre por la noche, cuando las cámaras registran a Agostina por última vez, en la confluencia de la Plaza des Pont y Andrea Doria. Al parecer con la intención de dirigirse a la parada del autobús situada a escasos metros, con la intención de volver a su casa, en Palmanova.
Por tanto, la principal hipótesis con la que trabajan los investigadores es que Agostina se introdujo de forma voluntaria en el contenedor de basura y que, posiblemente pudo haber perdido el conocimiento debido a su escasa estatura, a su baja tolerancia al alcohol y a que tomaba medicación. Además, ha agregado, de camino a la parada del autobús la joven paró en una tienda de alimentación que frecuentaba, cuyo dueño aseguró que esa noche parecía algo afectada.
Si bien es cierto que no hay testigos que vieran a la joven introducirse en el contenedor, la localización de su teléfono móvil lo sitúa allí hasta las 00:27, cuando pasó el camión de Emaya, los vació y se llevó la carga a la central de Son Reus.
Los investigadores necesitaron varios días para tener los resultados del del terminal móvil. En cuanto los recibieron acudieron a la incineradora, que paralizó las cremaciones, pero era ya el lunes 7, es decir, habían pasado cinco días de la desaparición, y probablemente la carga que trasladó el camión aquella noche ya había sido incinerada.
De momento, ha lamentado el inspector jefe de Homicidios, no han encontrado ningún vestigio en Son Reus que pudiera pertenecer a Agostina. Sí han hallado varios restos óseos, algunos de los cuales están siendo analizados por los forenses para tratar de determinar su pudieran ser de la desaparecida. Aunque ha asegurado que todos los indicios apuntan a que el cuerpo sin vida de Agostina se encuentra entre más de 15.000 toneladas de residuos.