Según los primeros datos, recogidos entre junio y agosto de 2024, menos del 40% del precio final de frutas y hortalizas llega a los productores, mientras que en carne y pescado este porcentaje supera el 50%.
Uno de los productos más afectados por esta diferencia es el limón, que representa el peor margen para los agricultores: mientras el productor recibe solo 33 céntimos por kilo, el consumidor paga 2,01 euros por ese mismo kilo, lo que supone un diferencial del 16%. En el caso de las hortalizas, el pimiento rojo es el producto con un porcentaje más bajo para el productor, que recibe solo el 18% del precio final: 0,62 euros por kilo frente a los 3,36 euros que paga el consumidor. El conseller de Agricultura, Joan Simonet, ha destacado que este observatorio responde a una demanda del sector primario y, por primera vez, permite conocer con precisión qué parte del precio de mercado llega al productor.
Joan Llabrés, director general de Calidad Agroalimentaria y Producto Local, ha añadido que esta iniciativa es solo el primer paso para ofrecer información pública y regular sobre los precios, destacando la importancia de las cadenas cortas de comercialización como la venta directa o cooperativas
En los próximos meses, el Observatorio ampliará su análisis a otros productos, como la leche y los productos ecológicos, para obtener una visión más completa del mercado agrario balear.