Se cae un mito. El aumento de la producción de energía solar durante este verano no ha contribuido a rebajar los precios de la electricidad. De hecho, está en máximos anuales. Sin embargo, también tenemos noticias positivas: las gasolinas y las hipotecas bajan de precio.
La electricidad ha alcanzado ahora su precio máximo de este año 2024 y se sitúa al mismo nivel del último récord, registrado en octubre de 2023.
El megavatio/hora ha superado, de media, los 120 euros, con un abanico que va desde los 115 euros del precio mínimo en las horas valle hasta una punta máxima de hasta 140 euros.
Y estas horas más caras son, ahora en verano, entre las 9 y las 11 de la noche, cuando se dispara el consumo de electricidad por el uso masivo en los hogares de los aires acondicionados para combatir el calor.
También ha contribuido a este encarecimiento de la electricidad el último aumento del IVA decretado por el Gobierno. Tras rebajarlo al 5 por ciento por la invasión rusa de Ucrania, ahora se está pagando el 10 por ciento por este impuesto al consumo, aunque podría subir al 21 por ciento a final de año. Y como toda moneda, la cruz tiene una cara.
A diferencia de la electricidad, las gasolinas continúan en su espiral bajista. Pese a las vacaciones y a los viajes turísticos por carretera, durante el pasado mes de agosto los precios del diésel se pusieron al nivel de julio de 2023 y las gasolinas del mes de febrero de este año. En ambos casos, están en mínimos anuales.
Aunque los precios de los combustibles fluctúan de una gasolinera a otra, de media la gasolina de 95 octanos ronda el euro con 55 céntimos y el diésel el euro con 40 céntimos, muy lejos de los hasta dos euros que pagamos en verano de 2022.
Con ello, llenar ahora un depósito de 55 litros cuesta de media 85 euros, cuando hace solo un año eran diez euros más. Y no hay dos sin tres. Ahora, las hipotecas.
El Banco Central Europea está rebajando los tipos de interés. Es decir, el precio que pagan los bancos para conseguir liquidez, lo cual repercute en los préstamos que solicitan o tienen vigentes los clientes.
Los titulares de hipotecas que vayan a renovar su cuota en los próximos meses se beneficiarán del mayor descenso interanual de esta variable desde el año 2013, lo que supondrá un gran alivio económico para las familias.
Como media, en el caso de una hipoteca de 150.000 euros a 25 años, la cuota mensual de unos 880 euros bajará a poco más de 800.
Eso sí, y pese a todo lo anterior, los precios de los alimentos no bajan en los supermercados. Lo confirma el último Índice de Precios al Consumo de este pasado mes de agosto que acaba de confeccionar el Instituto Nacional de Estadística.