La patera llegó en la mañana del 3 de agosto de 2022 a Cabrera.
Era una embarcación de algo menos de diez metros de eslora y en ella viajaban 30 personas: 16 hombres, cinco mujeres y diez menores, algunos de corta edad.
Según la Fiscalía, la nave disponía de dos motores y se quedó sin combustible, quedando a la deriva durante toda una noche. Llevaban en el mar unas 15 horas, desde las 08.00 del día anterior, cuando fueron rescatados por la Guardia Civil tras pedir auxilio por teléfono.
Sólo dos de los diez menores de edad llevaban el chaleco puesto y el grupo ya se había quedado sin agua e n el momento del rescate.
Al llegar a tierra, uno de los pasajeros incriminó al joven ahora condenado en firme como el patrón de la embarcación.
El testigo explicó que había viajado con su esposa y tres hijos, y que su intención era ir a Francia. Dio detalles sobre cómo había contactado con los organizadores del viaje y lo que había pagado: 1.600 euros por adulto.
Asimismo, aportó un vídeo grabado por él mismo donde se identificaba al acusado como la persona que llevaba los mandos.