Por todo ello, la consellera de Familias y Asuntos Sociales, Catalina Cirer, reclama al Gobierno Central que actúe al considerar que la situación es "dramática" ante la falta de espacios y recursos para atender niños y adolescentes menores no acompañados.
En el encuentro, los asistentes han coincidido en la preocupación ante la consolidación de las Baleares como ruta migratoria, especialmente con Argelia.
El objetivo de esta iniciativa es asegurar que ningún menor quede desatendido, garantizando que reciban la atención y los servicios necesarios para su bienestar y desarrollo. De aquí el compromiso del Govern con las cuatro instituciones insulares, por ello, la consellera Cirer ha anunciado una línea extraordinaria de subvenciones para que puedan hacer frente al sobrecoste que supone la llegada de migrantes a las Islas.
De hecho, Cirer, que ha estimado que la llegada de menores no acompañados supone un sobrecoste anual a los Consells Insulars de aproximadamente 40 millones de euros.
Los cuatro Consells Insulares aseguran estar "desbordados", especialmente Formentera ante la llegada masiva de migrantes. En el caso del IMAS, su presidente, Guillermo Sánchez, asegura que actualmente cuentan con 303 menores no acompañados.