Desde el 23 de junio hasta hoy, 640 menores de entre 9 y 16 años han participado en el proyecto educativo que este año se ha centrado en la protección del territorio.
El conseller insular de Presidencia, Antoni Fuster, ha explicado que «estos campamentos emblemáticos suponen una oportunidad única porque niños y jóvenes de Mallorca crezcan, aprendan y disfruten en un entorno natural incomparable». El conseller ha destacado que el proyecto «fomenta valores como la convivencia, el respeto por el medio ambiente, la responsabilidad o la autonomía».
La institución insular ha recibido 2.500 solicitudes el que suponen 600 más que el año pasado. Antoni Fuster ha celebrado la gran participación que refleja «el entusiasmo y confianza que depositan las familias en los campamentos». Así, ha anunciado que ya se estudia la manera de aumentar la oferta en orden al próximo año «ya sea incrementando nuevas plazas o añadiendo más días».
Durante su estancia en los campamentos, los participantes han disfrutado de varias actividades recreativas como por ejemplo actividades acuáticas o excursiones. Destacan, la visita al aeródromo de Pollença para conocer los hidroaviones o veladas nocturnas con juegos adaptados al tema educativo: la protección del medio ambiente.
