Según un comunicado de prensa, a las 14:30 horas del 18 de junio, se recibió un aviso en la Sala del 092 alertando sobre posibles obras ilegales en el interior de un local comercial en dicha barriada. Al llegar al lugar, los agentes de la Unidad de Seguridad Integral (USEI) encontraron a un operario realizando las obras, que consistían en la subdivisión del local en varias estancias.
Las obras, que abarcaban tanto la planta baja como el sótano, incluían la creación de diez habitaciones por planta, sumando un total de 20, todas debidamente numeradas. También se estaba estableciendo una zona de baños, cuadros eléctricos de gran tamaño y calentadores de agua. Algunas de las habitaciones ya estaban ocupadas, y los inquilinos declararon haber pagado 630 euros más un mes de fianza por el alquiler, a pesar de que las estancias carecían de cocina y baño.
Ante estos hechos, los agentes elaboraron un informe urgente dirigido al Departamento de Disciplina y Seguridad de Edificios del área de Urbanismo, Vivienda y Proyectos Estratégicos para que se tomaran las medidas necesarias.