A su llegada, los agentes fueron requeridos por la víctima, quien les relató que al regresar a su domicilio tras una noche de copas, su pareja comenzó a insultarla, propinándole un mordisco en la mejilla y la amenazaba de muerte, mientras sostenía un cuchillo con una hoja de 20 cm. La mujer presentaba lesiones en el rostro.
Una testigo presencial que corroboró en su totalidad el relato de la víctima, decidió llamar a la Policía Local. Su acción disuadió al agresor, un ciudadano peruano de 35 años, quien se dirigió a una habitación próxima para dormir.
Al localizar al agresor, los agentes constataron que dormía profundamente bajo la influencia del alcohol. Junto a él se encontraba el cuchillo con el que había proferido las amenazas y procedieron a su detención por los presuntos delitos de vejaciones, lesiones y amenazas en el ámbito familiar.
El detenido fue conducido a las dependencias policiales de la Policía Local. Tras la realización de las diligencias oportunas por parte de la Unidad de Policía Judicial (UPJ), pasó a disposición judicial, quedando en libertad con cargos.
La víctima declinó presentar denuncia por los hechos. Sin embargo, debido a que la valoración policial dio un resultado de riesgo extremo, las medidas de protección establecidas en el protocolo VIOGEN se mantendrán vigentes.