La quinta edición del foro turístico Myt Summit ha puesto el foco en la convivencia. Una cuestión de plena actualidad en las Islas. Desde el sector aseguran que es primordial que haya respeto y equilibrio entre residentes y visitantes y reconocen que se debe mejorar los flujos turísticos.
En Baleares se ha llegado, por unanimidad, a la conclusión de que es necesario poner límites al turismo. Ante esta situación, tanto el sector turístico como las principales instituciones de las Islas reconocen que debe existir un equilibrio entre la principal actividad económica de las Islas y mantener la calidad de vida de los residentes, por lo que las decisiones políticas y empresariales que se tomen, serán fundamentales que Baleares siga siendo un destino competitivo.
De hecho, la convivencia entre residentes y turistas se ha convertido en el principal reto al que se enfrentan. Sin ir más lejos, el Govern balear ha impulsado un gran pacto político y social para combatir la masificación y transformar el modelo turístico actual hacia uno más sostenible. Eso sí, el cambio debe hacerse basándose en datos objetivos y no en percepciones.
En este sentido, la presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca, Maria Frontera, ha reconocido que el sector lleva años tratando de buscar este equilibrio entre residentes y visitantes, si bien ven indispensable que el sector vaya de la mano de la administración pública para lograr esta armonización.
El congreso turístico Myt Summit ha congregado a profesionales de diferentes sectores relacionados directa o indirectamente con el turismo, con el objetivo de reflexionar sobre las claves y las posibles palancas que permitan garantizar la convivencia en las Islas.
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