Estas propuestas serán discutidas en la Mesa para el pacto social por la sostenibilidad. El alcalde, Jaime Martínez, explicó en rueda de prensa que las medidas buscan la sostenibilidad social, económica y medioambiental del turismo y se debatirán en el pleno de este jueves. Entre las propuestas, se incluyen la limitación del número de cruceros, la entrada de coches de alquiler y grupos de visitas turísticas, así como la introducción de nuevas tasas.
Las zonas afectadas por la reducción de locales de ocio y establecimientos de pública concurrencia incluyen Cala Major, Paseo Marítimo y Playa de Palma.
El Ayuntamiento propone evaluar estas cuestiones, que van más allá de sus competencias municipales, basándose en datos. Las medidas incluyen limitar o prohibir ciertos cruceros, imponer dos tasas a los cruceristas, revisar al alza las tasas de residuos y agua para cruceros y grandes yates, y regular los grupos organizados de turistas y visitas guiadas.
Además, se estudiará la posibilidad de prohibir o limitar los 'party boats', controlar el número máximo de coches de alquiler en la ciudad, aumentar la vigilancia del alquiler turístico ilegal, prohibir el consumo de alcohol en la calle, crear más aparcamientos disuasorios, mejorar el transporte público y colaborar en las 'operaciones nube'. También se propone una tasa especial de residuos para locales 'take away'.
El alcalde subrayó que estas medidas deben ser estudiadas para determinar su necesidad y serán debatidas con el objetivo de encontrar consenso político, pero se llevarán a la Mesa para el pacto social independientemente de su aprobación en el pleno.