La concentración, organizada por el Banc de Temps de Sencelles, ha recorrido las principales calles de Palma con el objetivo de reivindicar un acceso a la vivienda digna al advertir que el turismo masivo está expulsando a los residentes de sus casas y municipios.
La protesta ha finalizado con la lectura del manifiesto en el que los organizadores han exigido a las instituciones e las Islas que pongan en marcha diferentes medidas para combatir la saturación turística. Entre estas medidas, destaca: que se declare la emergencia habitacional en Baleares, reconocer que las Islas son una zona tensionada para regular el precio de los alquileres, una moratoria de alquiler vacacional, dar garantías a inquilinos y arrendatarios y ayudas para rehabilitar viviendas, realojar a personas desahuciadas, así como también limitar la compra de viviendas a grandes fortunas y no residentes.
"Esta tierra debe ser donde nuestros hijos puedan crecer con seguridad y dignidad, con un turismo controlado que no condicione nuestras vidas", han advertido desde el Banc del Temps de Sencelles.
