Alzamora entiende que la gravedad y magnitud de las informaciones publicadas "hacen necesaria una explicación atendiendo a que es la institución insular la competente en materia de ordenación e inspección turística". Tras dos días, dijo Alzamora, "el silencio de Galmés es muy sospechoso".
Por el momento, MÉS ya ha anunciado el registro de diferentes preguntas con respuesta escrita así como la solicitud de documentación relacionada con el establecimiento hotelero y gestionado sin licencia por parte del director de Transparencia del Govern. Sin embargo, el portavoz ecosoberanista quiere que sea el presidente quien explique públicamente que sabía el departamento de turismo sobre el caso y si ha existido algún tipo de trato de favor.
Jaume Alzamora ha remarcado que todas las acciones puestas en marcha desde que trascendió el caso, pretenden esclarecer los hechos, conocer y si ha existido algún intento de ocultar información para favorecer el alto cargo ahora señalado para operar sin la correspondiente licencia que otorga el Consell de Mallorca.
En palabras de Alzamora, la petición de comparecencia ha sido hecha con la intención de esclarecer dudas y dignificar a la institución. "Queremos saber si había hecho algún tipo de solicitud de licencia o si, en todo caso, han existido indicaciones para encubrir el caso". Según Alzamora, "Galmés debe explicar cómo los servicios de inspección no detectaron el caso de un establecimiento que se anunciaba por todas partes. Se necesitan muchas explicaciones".
De hecho, Jaume Alzamora ha recordado también que tanto el presidente insular como el actual responsable de Turismo han reiterado en los últimos meses que la oferta ilegal es uno de sus caballos de batalla. "Ahora tienen una oportunidad de demostrarlo".
