Una vez en el lugar de los hechos, los agentes fueron requeridos por una mujer, acompañada de dos menores que, manifestó haber sido agredida físicamente por su pareja, presente en el lugar. El cual mostraba síntomas evidentes de embriaguez.
La dotación actuante controló la situación, presenció reiterados insultos hacia la víctima, verificó el escenario, obtuvo por separado la información de ambas partes, y finalmente constató las lesiones de la perjudicada.
Analizados los hechos, concluyeron que se había producido un episodio de violencia de género, motivo por el cual procedieron a la detención del varón, que se resistió violentamente.
Durante el traslado del detenido a dependencias policiales, propinó innumerables patadas y cabezazos a una de las puertas traseras del vehículo policial, ocasionando varios desperfectos.
La víctima fue informada del procedimiento a seguir para formular la correspondiente denuncia, y ser asistida por las lesiones sufridas, que no revestían gravedad.
El detenido, de 45 años y nacionalidad española, fue puesto a disposición judicial.