Según ha informado la Benemérita en un comunicado este lunes, la investigación se inició a finales de julio tras la denuncia presentada por una de las encargadas de las instalaciones, quien manifestó haber sufrido el robo de un poni junto a sus elementos de monta.
De acuerdo al relato de la víctima, una pareja acompañada de una niña había accedido al Safari en una furgoneta de alquiler y, tras finalizar el circuito en vehículo, se dirigió a la zona del zoo para alquilar un poni de paseo para la menor.
Tras observar que no habían devuelto el animal, comenzaron una búsqueda por las inmediaciones sin éxito, presentando finalmente la denuncia.
Realizadas multitud de gestiones, los guardias civiles consiguieron averiguar que el equino había sido desplazado en la furgoneta de alquiler a una lujosa finca situada en la urbanización de Son Vida.
Una vez recuperado el animal, fue devuelto a sus legítimos propietarios, procediendo a la detención del supuesto autor de los hechos en esa urbanización de Palma.
