Una sensación de bochorno que se activará, por un lado, por el aire cálido de origen africano que sigue llegando a Baleares empujado por el viento de componente sur-suroeste desde el Sáhara. Y, por otro, por la humedad ambiental, cercana al 80 por ciento en las últimas horas de la tarde.
Por tanto, una jornada la del jueves que será, de nuevo, bochornosa… como también habrá sido tórrida la noche del miércoles al jueves.
Sin embargo, ya a últimas horas de la tarde o ya entrada la noche se prevé el inicio del anunciado cambio de tendencia.
El viento rolará a nordeste, las temperaturas comenzarán un marcado descenso en el norte de las islas y se espera que, de cara al viernes, llegue el cambio previsto por la AEMET, con una bajada apreciable de las temperaturas, aunque será solamente por unos pocos días.