Cuatro de los ocho miembros de la mesa negociadora del Sepla han dejado sus puestos en bloque por no estar de acuerdo con la estrategia que se estaba imponiendo desde la dirección del sindicato de pilotos en las negociaciones con la aerolínea Air Europa para llegar a un acuerdo salarial.
Los dimitidos han comunicado que cesan en su representación ya que el resto de la parte sindical de la mesa negociadora, liderados por Carlos Sánchez, se niegan a cerrar un nuevo convenio colectivo pactado con la compañía aérea y, así, desconvocar inmediatamente los paros programados.
Y es que la mitad de los miembros del Sepla en la negociación propugnaban cerrar un preacuerdo con Air Europa y abrir una tregua hasta septiembre, como así se ha hecho en Air Nostrum, con el objetivo de evitar daños económicos a la empresa en plena temporada alta.
Con este abandono, la mesa negociadora pierde su legitimidad y deberá ser nombrada una nueva. Con ello, ahora los pilotos del Sepla deberán decidir si renuevan la confianza en sus representantes que pretenden mantener una posición intransigente basada en paros o, por el contrario, optan por la posición de los dimitidos y negocian un acuerdo, como ya han hecho el resto de los sectores laborales de Air Europa.
Recordar que el ala radical del Sepla ha ejecutado ya tres periodos de huelga desde finales de abril y, según fuentes de la compañía mallorquina, han provocado un lucro no cesante de cien millones de euros.
Globalia, empresa matriz de Air Europa, recalca que, como con el resto de los trabajadores de la compañía, las negociaciones siempre han sido flexibles y, al igual que con los demás sectores laborales, se han pactado acuerdos con mejoras salariales.
Así también se les ha propuesto a los pilotos, pero un sector del Sepla se ha cerrado a cualquier tipo de pacto. Un bloqueo a todo acuerdo que ha provocado, precisamente, el cisma del mismo sindicato de pilotos.