Eran las 10:34 cuando Jaime Martínez juraba su cargo como alcalde de Palma. Unos instantes después, recibía de manos de su predecesor, José Hila, la vara de mando con la que gobernará en minoría el futuro de la capital balear durante los próximos cuatro años.
A continuación, Martínez ha pronunciado su primer discurso como primer edil de Palma, donde ha destacado la importancia de situar "el interés general por encima de cualquier otra cosa", en referencia al resto de partidos de la oposición, animándoles que "ser capaces de llegar a acuerdos, que es lo que esperan los ciudadanos".
Martínez ha destacado cinco ejes básicos sobre los que se sustentará su gobierno municipal de manera inmediata: "limpieza, seguridad, movilidad, vivienda y revolución fiscal".
De este modo, y tras las comicios celebrados el pasado 28 de mayo, el PP dirigirá en solitario, pero también en minoría (11 concejales) los designios de Palma durante los próximos cuatro años. En la oposición se incrustará VOX con 6 representantes. Una oposición que será, en palabras del propio Coll, "constructiva, pero contundente".
A su lado, el ya ex alcalde José Hila liderará, con los 8 concejales del PSIB, la oposición desde los partidos de la izquierda. Una oposición que se verá complementada por la presencia de MÉS per Palma (3 concejales) y Unidas Podemos, que se ha quedado con Lucía Muñoz como única concejal electa.
Cabe recordar que Cs, tras la última debacle electoral, desaparece del pleno municipal donde hasta hace poco menos de un mes estaba presente con hasta cuatro concejales.