Los ciudadanos extranjeros residentes en las Islas Baleares de los 27 países que forman la Unión Europea, además de otros estados con acuerdos bilaterales con el Reino de España que así lo contemplan, tienen derecho a depositar su voto el 28 de mayo en las urnas de las que surgirán los alcaldes y alcaldesas de los 67 municipios de la comunidad.
Son, exactamente, 19.135 personas contabilizadas en el denominado Censo Electoral de Residentes Extranjeros. De ellos y por orden de mayor a menor, 6.000 son alemanes, cerca de 4.000 italianos, les siguen 1.800 franceses, 1.500 rumanos y 900 búlgaros. Después, ya con cifras inferiores, les siguen los residentes en nuestra comunidad con pasaporte de los Países Bajos, de Suecia, Bélgica, Polonia y Portugal, todos ellos con votos por debajo de las quinientas personas por nacionalidad.
Sin embargo, al no existir acuerdos de reciprocidad, no podrán votar el 28 M en las municipales, ni en ninguna otra urna, los inmigrantes residentes en Baleares originarios, por ejemplo, de Marruecos, China o Colombia, Bolivia y Ecuador, comunidades que contabilizan conjuntamente más de 100.000 habitantes en Baleares.
Curiosamente, y para comprender la magnitud del voto extranjero, recordar que los cerca de 6.000 alemanes que podrán votar son más que los españoles residentes en municipios como Alaró, Consell, Esporles y Llubí, todos ellos por debajo de esta cifra.