Así lo han denunciado, una vez más, este sábado casi 500 manifestantes frente al Consolat de la Mar, al mismo tiempor que reclaman un plus de insularidad que les permita afrontar estos gastos. Todos ellos enarbolaban un plátano como símbolo del plus que sí cobran sus compañeros de las Islas Canarias por desplazarse de las islas mayores a las menores.
Los sindicatos agrupados en UNISEP, la Plataforma por la Igualdad de los Servicios Públicos, han denunciado casos de "profesores que hasta ahora vivían en pisos pero que ahora se tienen que ir a donde puedan porque les echan del piso para dedicarlo al alquiler turístico".
Los precios de estas viviendas hasta finales de junio, fecha en la que aún deben permanecer en Eivissa o Formentera hasta el fin del curso escolar, son de 1.000 euros a la semana o 5.000 euros al mes. Víctor Villatoro, presidente del sindicato de docentes ANPE, denuncia que "esta situación se da en junio y septiembre".
El problema se repite en el caso de médicos o policías.
En Canarias el plus de insularidad es de 600 euros, mientras en Baleares es de 100 euros. Y allí la vivienda está más barata que en nuestra comunidad.
Todo ello lleva a que los funcionarios y otros trabajadores públicos (policías, guardias civiles, de la administración general del Estado...) no quieran cubrir las plazas libres que se ofertan en Baleare, lo que redunda en un mal servicio público a los ciudadanos por falta de personal.