El viento soplará, en las primeras horas, de nordeste para girar después a este-sureste, en general flojo.
Las temperaturas mínimas se mantendrán sobre los 11 grados en las primeras horas del día para después ir escalando los termómetros y situarse, ya pasada la mitad de la jornada, en unos cálidos 24 grados. Una situación de plena primavera.
Y tras una noche 60 minutos más corta por el cambio de horario de invierno a verano decretado por la Unión Europea, el domingo prolongaremos la misma tónica meteorológica: brumas y bancos de niebla ocasionales hasta primeras horas de la mañana, predominio de cielo poco nuboso el resto del día, viento de sur rolando a componente oeste y, también, temperaturas fluctuando desde los 11 grados de mínima a los 24 grados o más de máxima. Y es que la semana concluirá con un ligero ascenso de la calidez ambiental en un claro proceso de evolución hacia la plena primavera.