Los resultados de este trabajo ha sido la catalogación de 1.247 taxones, 403 más respecto a la anterior recopilación elaborada en 2012.
El estudio incorpora las especies que se han localizado al menos una vez en las últimas décadas en la reserva natural. El TAIB, además de recopilar toda la información histórica acumulada de los diferentes estudios que se han ido realizando en la Reserva en los últimos años, también realizó muestreos propios con el fin de detectar nuevas especies de grupos de insectos poco estudiados.
Por regnos, los más abundantes son el de los animales, con 562 especies. Los grupos más diversos en este reino son los insectos, con 257 especies, y el de las aves, con 236 especies.
Las plantas son el segundo reino más abundante: se han cifrado hasta 488 especies distintas.
Por detrás les siguen el reino de los hongos, con 158 especies, y otros reinos mucho menos visibles, como bacterias, protozoos u otros. A pesar de ser menos abundantes, en lo que se refiere al conocimiento de los hongos se ha producido un notable avance gracias al esfuerzo de investigadores y especialistas, así como de las algas y las bacterias. Los tres son grupos de seres vivos que, a pesar de la gran función que desarrollan en el mantenimiento de los ecosistemas en los que viven, a menudo pasan desapercibidos.
Aunque las aves son posiblemente las especies más visibles y las que buscan mayoritariamente los visitantes, debe tenerse muy presente que son precisamente los invertebrados (como los insectos, crustáceos, moluscos o anélidos) los que sustentan las redes tróficas de los humedales como s'Albufereta. Su conservación resulta imprescindible si se desea continuar disfrutando de la presencia de numerosas aves.
La Reserva Natural de s'Albufereta fue declarada en 2001 mediante Decreto 121/2001 (BOIB núm. 130, de 30 de octubre). Comprende 211 hectáreas de zona húmeda, rodeada por terrenos agrícolas de gran valor patrimonial y paisajístico.