Tres años después, de millones de muertos en todo el mundo y con casi 120.000 víctimas en España, la realidad es que en nuestra memoria anidan los recuerdos de las mascarillas que no llegaban, los trajes de protección fabricados artesanalmente con bolsas de basura, los profesionales sanitarios luchando en las trincheras de las UCIs para salvar todas las vidas posibles, el esfuerzo de todos por salir adelante y, también, el mantra que nos acompañaba cada día a las 8 de la tarde, con los aplausos desde los balcones: de esta saldremos más fuertes.
De esta saldremos más fuerte se convirtió, casi, en el himno nacional. Sin embargo, tres años después, el sistema de salud español hace aguas por todas partes.
Las movilizaciones de los profesionales de la sanidad han sido constantes desde que se retiraron todas las restricciones sociales. Hemos vuelto a viajar, a las terrazas y a salir de noche… pero las listas de espera se han multiplicado y el colapso es habitual en Urgencias y en los centros de atención primaria.
El recuerdo del Estado de Alarma se difumina, pero aún hoy en día seguimos arrastrando las consecuencias de la pandemia. Los Fondos Europeos se han convertido en un espejismo para las pequeñas empresas y los autónomos. Solo las grandes multinacionales se han beneficiado de la lluvia de millones de euros llegados desde Bruselas para reactivar la economía. Una economía que, una vez más, prioriza a los que ya son poderosos para marginar a los que boquean solicitando una mano que les rescate de la quiebra.
De esta saldremos más fuertes, nos dijeron. ¿Seguro?
En el tercer aniversario de la declaración del Estado de Alarma que marcó para siempre nuestras vidas, hemos querido salir a la calle para preguntarles cómo recuerdan ustedes las primeras horas de ese episodio anclado para siempre en nuestra memoria.