El proyecto, financiado en su totalidad por la Fundación Othman Ktiri y en colaboración con la Association de Recherche pour le Développement (ARD), las Autoridades Provinciales de Tinghir, y la Association des Usagés d’Eau Agricole Akdim N’ait Aissa Oubrahim (AUEA) de Marruecos, está dirigido por Mhamed Mahdane, presidente de la ARD y profesor de sociología rural de la Universidad de Agadir.
El principal objetivo de esta iniciativa solidaria es la de contribuir a recuperar y preservar el legado patrimonial y cultural del ingenioso sistema de irrigación de las khettaras, un sistema tradicional y ancestral de captación y conducción de aguas subterráneas cuyo origen se remonta a la antigua Persia, hace más de 3.000 años.
Se trata además de un proyecto sostenible y respetuoso con la población de las regiones rurales donde se desarrollará. Las personas mayores, los jóvenes y sobre todo las mujeres como piedra angular de la sociedad bereber de los oasis, se sitúan en el foco principal de la iniciativa en una región donde el apego a la tierra y la perpetuidad de los valores tradicionales de solidaridad, comunidad y gestión colectiva juegan un papel fundamental. El proyecto ayudará a mejorar la vida de más de 1.200 familias de la zona de intervención y beneficiará a más de 5.000 personas.
El presidente de la Fundación con sede en Mallorca, Othman Ktiri ha asegurado sentirse “muy ilusionado de que el primer proyecto internacional que llevamos a cabo desde la Fundación se desarrolle en mi país de origen, concretamente en una de las regiones más áridas de Marruecos, donde predomina la escasez de un recurso tan básico como es el agua. Con esta iniciativa reafirmamos, una vez más, nuestro compromiso de ayudar a mejorar la calidad de vida de los colectivos más vulnerables, al mismo tiempo que contribuimos al cuidado del medioambiente y a preservar un legado patrimonial único”.
En estos momentos ya se ha iniciado la primera fase del proyecto con la colocación de paneles solares en el pozo colectivo, que dará soporte al sistema tradicional de la galería drenante, cuando el agua de la capa freática escaseé.
En una segunda fase se procederá a ejecutar los trabajos en los canales primarios, la limpieza de la galería principal de la khettara, así como la plantación de árboles frutales. El proyecto contempla además un programa de formación de agricultores dirigida a la población de estas regiones rurales.
Considerada como uno de los sistemas más antiguos de gestión del agua de los cultivos y auténtica obra de ingeniería civil, esta técnica de irrigación de aguas se mantiene todavía en numerosas regiones del mundo. En el caso de España las galerías drenantes se implantaron en las regiones de Al-Andalus tras la conquista islámica y siguen prevaleciendo en la zona del Levante, en Madrid, así como en los dos archipiélagos, Canarias y Baleares, siendo Mallorca la isla balear donde se concentran un gran número de captaciones, como las conocidas Fonts de Mina.