El detenido y la menor comenzaron a mantener conversaciones de forma continuada y llegaron a intercambiar fotografías íntimas, momento en que los padres de la menor tuvieron conocimiento de los hechos.
En ese punto los contactos entre el joven y le menor cesaron temporalmente pero él desoyó las advertencias de los padres de la chica e incluso de amigos suyos que le indicaron que no podía mantener relaciones con una menor de 16 años.
Así las cosas, la Policía Nacional recibió aviso de lo que estaba sucediendo y comenzó a investigar, llegando a la conclusión de que el joven había embaucado a la menor y que sus planes pasaban por mantener relaciones sexuales con ella, todo ello sin perder de vista que él tenía fotos íntimas de ella.
Finalmente, el joven fue detenido por un delito de corrupción de menores.
Los agentes del grupo especializado en estos casos recomienda el control parental sobre el uso de las redes sociales usadas por menores, pues estas personas se ocultan bajo un anonimato que impide conocer de un modo fehaciente con quién se está conversando, desconociendo a su vez las intenciones de los usuarios, por lo que se recomienda no facilitar información personal a desconocidos por esta vía, así como evitar intimar con personas que contactan con nosotros por las redes sociales y de las que no tengamos referencias anteriores y, por supuesto, mantener los perfiles en modo “privado”.