Dos comunidades insulares españolas han liderado las estadísticas de la compraventa de viviendas del pasado año. Canarias y Baleares aumentaron las transacciones inmobiliarias en más del 25 por ciento en 2022 sobre los doce meses anteriores. Unas cifras de récord en dos ámbitos territoriales marcados, además, por el turismo, especialmente el de segundas residencias y el del alquiler vacacional.
De hecho, tan solo las grandes ciudades siguen la estela de Baleares y Canarias, además de aquellas regiones que se han convertido en puntos de destino de ocio los fines de semana o veraniegos, como La Rioja, Asturias y Cantabria.
Según las cifras del Instituto Nacional de Estadística, el año pasado se realizaron casi 700.000 operaciones de compraventas de casas en toda España, una cifra que no se registraba desde el ya lejano año de 2007, momentos antes del estallido de la burbuja inmobiliaria.
Asimismo, siete de cada diez contratos se suscribieron entre personas físicas, lo que destaca la potencia de las compraventas directas entre particulares, sin intervención de empresas inmobiliarias y, por tanto, de viviendas de segunda mano.
Unas cifras, que sin embargo tienen un contrapunto. Pese a marcar el año 2022 un récord absoluto en la compraventa de viviendas, la crisis económica provocada por la guerra de Ucrania y la subida de todos los precios, además de un claro enfriamiento del mercado, han ralentizado las transacciones inmobiliarias en el último trimestre, llegando a un decrecimiento del 6,5%, según datos del Registro de la Propiedad, compartidos por el Colegio Oficial de Administradores de la Propiedad Inmobiliaria (COAPI). Según COAPI, lo que si ha subido notablemente es el precio medio por vivienda, que sumado a la creciente inflación y a la subida de tipos de interés, amenaza con volver a ver casos similares a la crisis de 2008, en la que muchos españoles fueron incapaces de asumir el precio de sus hipotecas, siendo desahuciados y llenándose las entidades bancarias de operaciones de dación en pago.
Con este panorama, no es de extrañar que algunas corporaciones políticas intenten a la desesperada buscar solución al preocupante problema de la vivienda. Tal es el caso de Unidas Podemos, que ha propuesto crear una inmobiliaria pública para rebajar el precio de los alquileres en las Islas, COAPI es bastante crítico al respecto y consideran más un titular precampaña electoral que una idea que vaya a ver la luz. Según su vicepresidenta, en casos previos de ideas de este tipo, han demostrado no funcionar.
