La plaza de Santo Domingo ha sido el hogar del Bar Marítimo de Palma desde hace 72 años. Un hogar que en las próximas semanas se convertirá en un gran depósito de obra al aire libre y que supondrá la desaparición, esperemos que temporal, de una de las terrazas más míticas de la capital balear.
Así, Jaume Cunill, ha señalado que "será como una plaza central donde los operarios depositarán toda la maquinaria. Nosotros lo perderemos todo". Una decisión de la que se enteró Cunill este mismo miércoles, a través del responsable de una de las constructoras que llevará a cabo el proyecto. "Nadie nos ha comunicado nada oficialmente. La obra se tiene que hacer y creará unas molestias, pero vamos a minimizar estas molestias de cara a todos los que estamos implicados", ha manifestado el propietario del Nou Marítim.
Una obra que se llevará por delante las 63 mesas que todavía hoy están disponibles en la terraza del Bar Marítimo. Una terraza que es el auténtico corazón de este local. "Nos representa el 99% de nuestra facturación", apunta Cunill, quien lamenta que "estamos hablando de unas obras que pueden durar unos 20 meses, por lo que el futuro se presenta bastante incierto".
Una incertidumbre y falta de información por parte de la Autoridad Portuaria de Baleares, según Cunill, que le impide saber si podrá abrir sus puertas este próximo lunes. "Si se puede abrir, abriremos. Y si no, pues tendremos que cerrar. ¿Hasta cuándo? No lo sabemos. No lo sabemos", se queja Cunill.
Las próximas semanas serán claves para el futuro de una decena de trabajadores y de un local sin el cual ya no se concibe el Paseo Marítimo de Palma.
Me parece una vergüenza la obra del Maritimo, están talando los árboles de manera indiscriminada, han colapsado el tráfico y tanto a los residentes como a los comerciantes de la zona los van a dejar sin parking. Esto va a arruinar a muchas familias y comerciantes de la zona.