Con los votos a favor de PSIB, Més y Podemos, y la abstención de El Pi han salido adelante los presupuestos del Consell de Mallorca para 2023. Unas cuentas que superan por primera vez los 600 millones de euros y que suponen un incremento del 16% respecto a este año.
El presupuesto de la institución insular se ha aprobado en un pleno extraordinario en el que PP y Ciudadanos han votado en contra y en el que Vox no ha votado porque ha abandonado el pleno. Al igual que sucedió en el debate de presupuestos del Govern, Vox ha utilizado su intervención para hablar del Tribunal Constitucional y otros asuntos de política nacional.
La presidenta del Consell Catalina Cladera, le ha llamado la atención en varias ocasiones recordando que el pleno era para hablar de presupuestos. Y el portavoz de Vox, Toni Gili, ha reprochado que no se le haya dado más tiempo por las interrupciones durante su turno de palabra. Finalmente, los consellers de Vox se han levantado el pleno asegurando que se ha coartado su libertad de expresión.
Otro punto de fricción entre el gobierno y la oposición ha sido la ausencia del portavoz del PP, Llorenç Galmés, en el pleno de aprobación de presupuestos.
