La huelga de los sanitarios después de fiestas es un tema que preocupa no solo al Govern, sino también a la oposición, una buena muestra de ello es que tanto la presidenta como la consellera de sanidad han sido preguntadas acerca de ello en el pleno del parlament. Armengol ha admite que es una situación compleja, pero que están trabajando desde la transparencia y los acuerdos.
Armengol ha defendido este lunes en el Parlament que desde 2015 se ha incrementado el presupuesto en este ámbito un 75 por ciento, que se han sumado 1.000 profesionales y que no hay límite presupuestario para contratación.
Por su parte, la diputada de la formación naranja ha recordado que "Faltan 350 médicos de familia y pediatras, hay un médico por cada 800 usuarios cuando la ratio aconsejada es de 300, cada año se jubilan entre 25 y 30 facultativos y no hay reemplazos, el pago de las guardias no se revisa desde hace años".
La consellera de Salut, por su parte, ha recordado qué medidas se están llevando a cabo para evitar la huelga. Ante las duras palabras de la popular Tania Marí, Patricia Gómez ha asegurado que son los populares los que ponen una trituradora de la sanidad pública cuando gobiernan.