El principio de acuerdo alcanzado entre el Ejecutivo y la banca, actualiza el Código de Buenas Prácticas de 2012. Sin embargo, su presidente, Alfonso Rodríguez, ha lamentado que su adhesión sea voluntaria. "Cualquier medida que se tome que vaya destinada a aliviar un poco la carga a las familias, nos parece importante", ha indicado Rodríguez, añadiendo que "el hecho de que se puedan adherir de forma voluntaria, deja en manos de los bancos si se adhieren o no. Nosotros pensamos que debería ser obligatorio".
De este modo, podrán acogerse a esta medida hogares con rentas anuales que no superen los 29.400 euros, así como también se facilitará la amortización anticipada de los créditos y se permitirá la conversión de las hipotecas de tipo variable a tipo fijo.
Si bien, Rodríguez considera que debido a las condiciones impuestas, muchas familias no podrán acogerse a este nuevo Código de Buenas Prácticas. "El código aprobado se ha quedado corto, ya que se estipula que para poder acogerte, el importe del recibo mensual de la hipoteca debe ser mínimo el 50% de los ingresos que tienes. Creemos que es excesivo e impedirá que muchas familias se puedan adherir", ha remarcado Alfonso Rodríguez.
En este sentido, el presidente de Consubal ha señalado que "lo suyo hubiera sido que los ingresos hubieran estado entre el 30 y el 35% como mucho, que además es lo que se recomienda como gasto para mantener la vivienda".
Desde su entrada en vigor en 2012, unas 7.000 familias han podido acogerse al Código de Buenas Prácticas en la isla.
