Largas colas e infinidad de trámites burocráticos. Esto es lo que el Govern quiere evitar en momentos de dificultad. Si bien realizar cualquier gestión puede suponer un reto hasta para el más experimentado, el escudo social del Govern tiene por objetivo hacer llegar sus medidas a las personas vulnerables con una gestión sencilla.
Por primera vez, conscientes de la dificultad de realizar ciertos trámites administrativos por una parte muy importante de la población, el Govern ha decidido dar un paso adelante y facilitar considerablemente la tarea a los ciudadanos, eliminando la temida burocracia.
Es por ese motivo que la ayuda extraordinaria para desempleados, aprobada como medida para combatir los efectos de la inflación y que asciende a 600 euros para los que reciben un subsidio y a 300 para los que perciben prestación por desempleo, se reconocerá automáticamente y no requerirá de solicitud.
¿Pero qué supone esto, a efectos prácticos? Simplemente no tener que hacer ninguna gestión. Bastará ser beneficiario de una de las dos pagas hasta el 23 de diciembre. Así lo ha explicado la consellera de Asuntos Sociales, Fina Santiago en rueda de prensa.
Una facilidad, la de tramitar automáticamente estas ayudas, que se extenderá a las pagas extraordinarias de aquellos beneficiarios de la prestación para cuidados en el entorno familiar y apoyo a cuidadores no profesionales.
Aunque, de momento, esta medida de suprimir la burocracia no se extiende a todos los trámites a realizar con la Administración, es un primer paso para una gestión más sencilla y eficiente de las gestiones administrativas.