El Anuario de la Educación de Baleares es un compendio de trabajos que recogen las principales tendencias y realidades educativas de las Islas. Hoy este anuario se ha presentado en rueda de prensa y una de las líneas fuertes a las que se hace un énfasis especial es la evaluación por competencias, que cobran especial importancia en el marco de la LOMLOE.
En este contexto la Formación Profesional ha dado pasos de gigante, que en los últimos años no solo ha mejorado considerablemente su calidad, sino que es una opción solicitada por las empresas, que buscan un perfil de trabajadores formados y ocupados que contribuyan a una mayor productividad. Esta demanda ha disparado la matriculación en FP, solo en los últimos cuatro cursos se ha incrementado en un 26,9 por ciento.
El cambio de normativa que se está produciendo en la actualidad, con la implantación de la LOMLOE y ley educativa de Balears hace que la percepción social de la FP cambie, sobre todo para el alumno, quien puede elegir su itinerario de formación. Aunque en el marco de la oferta y la demanda se ven obligados a hacer ajustes de forma constante
El objetivo, y el éxito, de la FP es su capacidad no solo de reducir el abandono escolar sino de constituirse como una garantía de inserción laboral, pues entorno al 65 por ciento de los alumnos de Formación Profesional Intensiva (hasta ahora denominada Dual), finalizan sus estudios con contrato de trabajo.
