El pasado sábado alrededor de las diez y media de la noche, un coche arrolló mortalmente a un joven alemán de 20 años que se había tumbado en la vía. La conductora del vehículo enseguida avisó al servicio de emergencias, pero nada se pudo hacer por la vida del turista.
Todo apunta a que el joven fallecido se encontraba bajo los efectos del alcohol y que tras desorientarse, entró en la autopista de Llucmajor con trágico final.
Unos atropellos que se han repetido en los últimos 12 años en otras cinco ocasiones, repitiéndose el patrón: todas las víctimas, en estado de embriaguez y desorientadas, accedieron a la autopista de noche por el mismo tramo a la altura de Es Pil.larí, donde lamentablemente acabaron siendo atropellados.
Un tramo que viniendo desde Playa de Palma cuenta con un camino peatonal que comunica con Es Pil·larí. Es justo en esa parte final, en la que al no haber señales ni iluminación, los turistas, por error, acaban accediendo a la autopista de Llucmajor.
Una situación que podría evitarse mejorando la seguridad, la señalización y la iluminación de este peligroso tramo. Sin embargo, desde el Departamento de Carreteras del Consell Insular de Mallorca no se contempla la mejora de este punto negro.