Actualmente son más de 800 familias que se benefician de los alimentos que se reparten desde esta ONG, "pero tenemos una lista de espera que no tenemos capacidad de atender", reconoce Catalina Aguiló, presidenta de esta entidad.
El incremento de los costes energéticos, unido a una inflación desbocada que en Baleares ha alcanzado el 10,7%, "ha obligado a muchas personas a necesitar de nuestros servicios por primera vez", apunta Aguiló.
"Muchos son trabajadores precarios, que una vez finalizada la temporada se quedan sin trabajo. También tenemos mucha gente a la que se le ha acabado el paro y necesitan de nuestra ayuda para poder salir adelante", reconoce Catalina Aguiló en una entrevista a Fibwi Televisión que puede consultar íntegra en el video que acompaña a esta noticia.
