Profesionales del Servicio de Inspección del Departamento de Transportes comprobaron como un taxista que circulaba por la calle Joan Carles I, en Eivissa, rechazó transportar a una turistas extranjeras porque la destinación demandada estaba "muy cerca". A continuación, los agentes de Transporte comprobaron que, el mismo vehículo, 200 metros más adelante, se paraba para recoger a una familia. Cuando el taxista inició el trayecto, al bajar la bandera, activó una tarifa que no era la correspondiente, la de la llamada, y por ello, decidió seguir al taxista. Aprovechando las retenciones de tránsito de la Avinguda Vuit d'Agost, los profesionales del servicio de inspección preguntaron al conductor del taxi porque había activado la tarifa 2, la de la llamada, si había recogido a los clientes cuando le dieron el alto, sin concertar previamente el servicio.
La otra infracción denunciada se registró en la zona del aeropuerto. Los agentes de Transportes del Consell d'Eivissa se dieron cuenta de que un taxi de Sant Josep no respetaba el orden de cola. Cuando se acercaron al conductor para preguntarle los motivos, respondió que tenía "prioridad" por encontrarse en su municipio. Los agentes le contestaron que, con la nueva ley, si hay clientes esperando en la parada se debe respetar el orden de llegada, independientemente del municipio, tal y como ha ido informando el Servicio de Inspección durante sus actuaciones desde la aprobación de la ley. El personal del Departamento de Transportes se informó al conductor que lo tenían que proponer para sanción y el taxista, con conducta agresiva, reaccionó con malas maneras y entró dentro de su coche dando un portazo y se marchó sin recoger a ningún cliente.
"La prioridad del Departamento de Transportes es perseguir a los taxis ilegales, pero las numerosas quejas de personas usuarias del taxi y de los propios profesionales del sector para el correcto funcionamiento de este servicio público nos ha obligado a destinar parte de nuestros recursos de inspección a comprobar el cumplimiento de la ley de orden de carga y descarga. Por desgracia, estas actuaciones han concluido con denuncias a taxistas que no cumplían la normativa, rechazando trayectos y cobrando un precio superior al establecido. Como hemos explicado en reiteradas ocasiones, igual que es esencial la coordinación entre las diferentes administraciones públicas, la policía y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, también es imprescindible que el sector del taxi dé ejemplo y ofrezca su servicio con las máximas garantías", ha valorado el vicepresidente segundo y conseller insular de Transportes, Javier Torres.