El cielo cubierto, algunas lluvias aisladas y un tiempo incierto han empujado, después del desayuno, a miles de turistas a cambiar sus planes. Desde las zonas de playa se han dirigido, principalmente en coches de alquiler, a Palma y los principales puntos de interés turístico de Mallorca, como Sóller, Deià, Formentor y toda la Serra de Tramuntana.
En Ciutat, la Policía Local ha activado la Operación Nube para regular la llegada de coches, su acceso a los aparcamientos subterráneos y el tráfico peatonal en el eje Catedral-Cort-plaza Mayor-Sant Miquel, así como el Mercat de l’Olivar, la calle Olmos, el Born y las principales vías comerciales.
Con todo, las tiendas, bares y restaurantes han aceptado de buen grado la llegada de estos turistas. Una opinión que no han compartido los sectores sociales contrarios a esta realidad.
